La Reunión de Alto Nivel de las Naciones Unidas (ONU) sobre Prevención, Preparación y Respuesta ante una Pandemia (PPPR) se celebró el 20 de septiembre en la sede de la ONU en Nueva York bajo el lema "Por un mundo más seguro: crear y mantener el impulso político y la solidaridad para la prevención, preparación y respuesta ante una pandemia".
El Presidente de la Asamblea General de la ONU convocó esta reunión para reconocer el enorme impacto de la pandemia de COVID-19 en los sistemas sanitarios y las sociedades de todo el mundo. La diabetes sigue siendo un importante factor de riesgo para los resultados adversos del COVID-19. Las personas con diabetes experimentan una probabilidad sustancialmente mayor de hospitalización y muerte debido a infecciones por COVID-19. Además, las estrictas medidas de confinamiento limitan su acceso a la atención sanitaria y repercuten negativamente en el control de la diabetes. Estas consecuencias adversas y estos retos ponen de manifiesto la necesidad de dar prioridad a las personas con diabetes como grupo de alto riesgo en futuras pandemias.
En esta reunión, los Estados miembros y la sociedad civil debatieron medidas para prevenir y prepararse ante futuras pandemias utilizando un enfoque de salud en todas las políticas. El resultado de la reunión fue una declaración política destinada a movilizar la voluntad política nacional, regional e internacional.
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